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La marca de lencería Nuez moscada: una propuesta ética para todo tipo de cuerpos

Todxs sabemos lo difícil que puede llegar a ser encontrar marcas que ofrezcan variedad de tallas y si a esto le sumamos que sean marcas éticas (ósea que no sean de fast fashion), se reduce aún más esta búsqueda.  ¿Y cómo se manifiesta esto en el mundo de la lencería? Después de investigar dentro del mercado peruano, llegué a la conclusión de que hay muy poca variedad de lencería para tallas grandes. Sin embargo, la marca de lencería Nuez moscada, un emprendimiento basado en Lima, nos trae una propuesta única como solución a esta problemática. 

The Galentines Launch: colección de la marca de lencería Nuez Moscada
“The Galentines Launch”
(Foto provista por la marca)

La historia detrás de la marca 

La marca de lencería Nuez moscada nació en el 2016 en Merida, Venezuela, gracias a la gran idea de dos mejores amigas venezolanas, Astrid y Clarisa, quienes se dieron cuenta que no encontraban los “strappy bralettes “que estaban tan en tendencia en el momento. A partir de esto, Astrid aprendió a coser y confeccionar como autodidacta y, poco después, hicieron su primera colección. Clarisa se enfocaba más en la imagen de marca y el marketing en redes, labor que continúa teniendo hasta hoy en día. 

Sin embargo, debido a la situación de su país, en el 2018 tuvieron que migrar y dejar en stand by el proyecto. Astrid se instaló en Lima y Clarisa en Estados Unidos y no fue hasta el 2019 que tuvieron un “segundo lanzamiento”. Después de conversarlo mucho, decidieron seguir con Nuez moscada en Perú. Fue un proceso difícil, ya que, en su posición de migrantes, la situación era complicada, no tenían conocimiento de la industria textil en Perú y no conocían a nadie en el país. Sin embargo, pudieron seguir adelante con la marca, y hoy en día está dando sus frutos. 

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Foto provista por la marca

Slow Fashion y Low Waste  

En cuanto el proceso de producción, la marca de lencería Nuez Moscada es Slow fashion, esto quiere decir que producen en pequeñas y medianas cantidades, no producen en masa y esto asegura la buena calidad de las prendas. Trabajan de la mano con un taller familiar peruano, con el cual generaron un vínculo íntimo y esto se ve reflejado en la calidad de cada una de las piezas lenceras. Por otra parte, trabajan bajo el modelo Low Waste, con lo cual producen la menor cantidad de desechos posibles y re-utilizan los retazos sobrantes. De hecho, tienen toda una colección hecha a partir solo de los retazos sobrantes de colecciones anteriores. 

Inspirar y empoderar a las mujeres mediante lencería única 

Astrid y Clarisa nos contaron sobre su proceso creativo. Su inspiración principal es hacer sentir bien a las mujeres en su propia piel, es por esto que hacen las piezas lo más amoldables a todo tipo de cuerpos.  Por otra parte, también se inspiran en cosas muy cotidianas y en las tendencias del momento, sin embargo, siempre mantienen la esencia atemporal de la marca en cada una de las prendas, para así poder darles una larga vida de uso. 

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The bouquet set de la marca de lencería Nuez Moscada
The Bouquet Set
The Lavander y The Limoncello bustier de la marca de lencería Nuez Moscada
“Lavander” y “Limoncello” bustier

Nos cuentan también que Nuez Moscada fue creciendo a la vez que ellas crecían como mujeres. La evolución de la marca va muy de la mano con la evolución de cada una de ellas y su proceso y deconstrucción como feministas. Para ellas es muy importante enseñar diversidad corporal y ofrecer lencería en la mayor cantidad de tallas posibles. Hoy en día cuentan desde la talla xs hasta la xxxl, y buscan poder expandirlas aún más mientras la marca siga creciendo. Sin dudarlo, el abanico de opciones y representación plus size en lencería en Latinoamérica es muy poca, y es por esto que Nuez Moscada lo ve como una necesidad social. 

Crear lencería escapando el male gaze 

Las dueñas nos cuentan que, en el mundo de la lencería, es muy común ver la sexualización del cuerpo de las mujeres a causa de la sociedad patriarcal en la que vivimos, y que en algunas oportunidades recibieron comentarios machistas hacia la marca. La lencería de Nuez moscada no está hecha para la satisfacción del hombre. Lo que buscan es poder hacer sentir a la mujeres cómodas y felices con su propio cuerpo, para el disfrute propio de cada clienta, y en ocasiones esto puede ir la mano con alguna pareja o no.  

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Para finalizar, Astrid y Clarisa nos comentan que tanto ellas, como la marca de lencería Nuez Moscada, están en un proceso evolutivo, cuestionándose sobre lo que nos ha inculcado el patriarcado, y buscan poder seguir evolucionando dentro de la moda inclusiva en todos los sentidos.  

Información de contacto 


Portada por Lorena Naveda

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